En un giro devastador, el gobierno humano desarrolla una cura para las mutaciones, desatando una crisis entre los mutantes. Mientras algunos ven la cura como una oportunidad para una vida normal, otros la ven como una amenaza existencial a su identidad y comunidad. Entre ellos, Jean Grey, quien ya luchaba con su poder psíquico descontrolado, se transforma en el Fénix, un ser oscuro y destructivo de poderes incomparables.
El Fénix se alía sorprendentemente con Magneto y su Hermandad, quienes ven la cura como una afrenta a la existencia mutante y una razón para intensificar su resistencia. Esta alianza desata una escalada en la batalla entre los X-Men, que defienden la coexistencia pacífica, y la Hermandad, que aboga por la supremacía mutante. Las confrontaciones se tornan cada vez más intensas y destructivas, mientras el conflicto amenaza con desgarrar aún más la relación entre humanos y mutantes.
Para los X-Men, la lucha no solo es física, sino también moral y emocional, ya que enfrentan decisiones difíciles sobre la aceptación de la cura, el control de poderes peligrosos y la lealtad a sus ideales de justicia y coexistencia. El destino de ambos grupos y el futuro de los mutantes penden de un hilo, mientras la oscuridad del Fénix y las ambiciones de Magneto amenazan con cambiar el mundo para siempre.