En esta secuela, Ip Man, interpretado por Donnie Yen, deja atrás Foshan y llega a Hong Kong, donde establece una escuela de Wing Chun. Sin embargo, pronto se encuentra en conflicto con un maestro local de Hung Fist llamado Hung Jan-nam, interpretado por Sammo Hung. Las tensiones entre los dos maestros de Kung Fu continúan aumentando hasta que se ven obligados a enfrentarse en un duelo épico. Este enfrentamiento no solo es físico, sino que también es una batalla de filosofías y valores, que pone a prueba la habilidad y el honor de ambos hombres. En medio de la acción y el drama, la secuela explora la complejidad de las relaciones entre maestros de artes marciales y la naturaleza cambiante del mundo que los rodea.